A la final sin brilantez

La religión oficial del Estado es el fútbol, el verdadero opio del pueblo. Y eso está bien. Veréis el lunes cuando acabe la Eurocopa y atendamos a las noticias de la crisis, de los recortes, del euro.....lo vamos a flipar.

Pero a lo que íbamos. Pasamos a nuestra tercera final consecutiva. Buscamos la triple corona...pero se echa de menos aquel juego enorme que nos encandiló en Austria hace cuatro años. Echamos de menos aquel tiki taka que se resolvía las jugadas brillantemente y que nos convirtió en el equipo más anotador del torneo. Vicente del Bosque se encontró un equipo hecho por Luis Aragonés y lo ha cambiado, lo ha vulgarizado, lo ha hecho ramplón y cagón. Hemos perdido profundidad y juego y si ganamos se debe a la suerte, como ayer; a cruces fabulosos, véase Portugal y Paraguay en el Mundial o a toques de genialidad de futbolistas que siguen siendo los mejores del mundo.

Ayer se notó el cansancio. Los jugadores estaban fundidos. Si a eso le unimos un delantero torpón y sin velocidad pues eso, ni un tiro a puerta. En medio de la segunda parte el sr. Del Bosque nos lo quita y mete a Cesc y después a un extremo Navas, quien me parece el peor jugador del equipo con diferencia (¿Y Mata? ¿Y Cazorla?...por favor). Por último la guinda  en el despropósito del planteamiento general del equipo: se saca del campo a Xavi y entra Pedro, un futbolista rápido, de acuerdo, pero que obligó a Iniesta a hacer de 9. Sin palabras. Y aunque en la prórroga fuimos mejores, el partido nos llevó a los penales por el pésimo planteamiento, sin duda, del entrenador.

En fin  que solo deseo que ganen la Copa aun jugando tan mal como ayer. Y es que el cansancio se nota y si no que se lo digan a Xavi Hernández, que para mí sigue siendo el mejor del mundo. No obstante que siga Del Bosque de seleccionador, porque no hay un tío con tanta suerte en el fútbol español.

PD. Glosa gloriosa a Ramos. Cambió el penalti a lo Pakuenka, por a lo Panenka.Qué tio....¡Ah!, que se me olvidaba, ¡cómo cantan los portugueses el himno! Emocionante.